El Dios que permanecerá a tu lado

Dios cumple sus promesas. En la riqueza y en la pobreza, en la salud y en la enfermedad, en lo bueno y en lo malo.

Cuando hayas cometido los errores más estúpidos de los que puedas recordar.

Cuando has hecho daño a casi todos los que han intentado quererte.

Cuando apenas puedes soportar mirarte a la cara en el espejo porque todo lo que ves es vergüenza y fracaso mirándote fijamente, burlándose de ti.

Cuando te sientes como si te hubieras revolcado en el lodo del mismo infierno, tienes un Dios que te ama. Tienes un Dios que se preocupa.

Tienes un Dios que se pondrá públicamente al lado de cualquier hombre o mujer, los abrazará, los perdonará y dirá al mundo: «Este es mi hijo. Le quiero. Le quiero. Y te desafío a que digas lo contrario».

Tienes un Dios así en Jesús el Mesías.

Él no puede y no dejará de amarte y de guardarte y de morir para hacerte bien.

 

Por Chad Bird